[:es]Quién es el que se necesita relajar?. Es la parte tuya que quiere ser reconocido? o tener éxito? Para comprender correctamente la relajación, necesitamos entender “el quién” que necesita relajarse. Hay que tener en cuenta que dentro de nosotros hay diferentes personas con diferentes personalidades. Esta la persona que quiere ser buena con una personalidad de ser dulce y servicial, esta la persona que quiere ser reconocida con una personalidad de sumisión. Y así, tenemos muchas caras y cada una de ellas necesita ser vista de frente. Tenemos que entender que no somos estas personas, ni sus personalidades.

El apego a cualquiera de estas personas nunca permitirá que te relajes. Estas personas nunca están a gusto con lo que tu eres,  nunca están satisfechas.

La relajación es un estado natural. Está activa en todas las acciones y es activa en la no-acción. La relajación es un estado de la mente, donde no hay más amenazas, no hay más logros, no hay más expectativas, no hay más justificaciones, no hay más excusas ni conversaciones mentales.

La verdadera relajación desafía al ego, el yo imaginable y el yo construido. Estamos acostumbrados a encontrar nuestro valor en la acción, hacer y hacer es lo que siempre vemos como éxito, y el parar es simplemente una amenaza. Pasar de la acción a la no-acción confronta a nuestros hábitos, y a nuestro sentido de que “si lo sigo haciendo, voy a encontrar mi valor, mi merito”, es en la acción en lo que tratamos de encontrar una seguridad imaginaria. La no-acción se siente lejana, imposible y amenazante.

A continuación 5 pasos para integrar la no-acción y la acción.

  1. En cualquier acción que hagas, observa si hay esfuerzo interior. Conversaciones internas como “tendría que” o “debo de” o “tengo que”, implica un esfuerzo interior. Estos tipos de frases son una imposición sobre tus acciones.
  1. Verifica los hechos: pregúntate si la urgencia de tu declaración es realmente válida. Tienes que ser sincero y honesto contigo mismo.
  1. Para y toma un respiro: Reinicia tu mente con lo que es real. Date cuenta que hay una parte de ti que se esclaviza con el exceso de acción o apatía.
  1. Confírmate a ti mismo que lo que habías pensado acerca de tus acciones o inacciónes fue sólo una invención de la mente.
  1. Descubre el presente, explora lo desconocido: la vida está llena de momentos de relajación, con infinitas maravillas, invenciones y creatividad. Estos atributos contribuyen a la relajación. Busque lo nuevo en lo que ya sabe.

Una vez que te hayas dado cuenta de que los conceptos de la acción y la inacción no son mutuamente excluyentes, puedes recibir una profunda relajación en tu vida. Este gran sentido de estar centrado se baña en una fuente de vitalidad, inspiración y fuerza que está siempre a tu lado.

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