[:es]El esfuerzo para estar bien, para superar el dolor o para controlar nuestra mente y emociones se interpone en el camino para iluminar el corazón.
A veces la incomodidad de no estar centrado o estar bien, es un impulso para investigar la espiritualidad. Muchos de nosotros hemos encontrado un maestro, una disciplina o enseñanzas que nos han ayudado a mantener la estabilidad física, emocional y mental. Valoramos estas prácticas y les damos una gran importancia. Nos han salvado del dolor, o tranquilizado de que estamos haciendo un buen trabajo.
Podemos tener una “carrera” tomando muchas “actividades espirituales” o “actividades de sanación”, sin embargo, a través del tiempo, no vemos ningunos cambios internos válidos. “El problema” continúa apareciendo en formas sólidas o sutiles y podemos sentirnos desanimados y frustrados frente al hecho de que no estamos cambiando realmente. Si este es el caso, puedes haber estado dando una “importancia y esfuerzo” a tu “vida espiritual” que no necesitas tener. Si has conectado un significado al “ser bueno”, al “ser reconocido”, al “evitar el dolor”, a “mi tiempo privado”, o cualquier otra cosa, estás creando un concepto falso de espiritualidad y estás abriendo un abismo entre tu mundo interior y exterior.
Perseguir el bienestar no te hace un verdadero cazador. El corazón del guerrero espiritual es movido por la devoción, no por el rendimiento. El corazón del guerrero está cómodo con cualquier incomodidad y busca solo la verdad de lo absoluto.
La ruta del bienestar te conduce a:
- A tener una finalidad, mientras el camino del buscador es un eterno despliegue hacia el infinito.
- Requiere esfuerzo, mientras que el camino del buscador se basa en la entrega.
- Se aprovecha de tí, ya que desde tu perspectiva nunca estarás lo suficientemente bien y serás lo suficientemente bueno para merecer la paz interior.
- Refuerza tu obstinación y te seduce a hacer más y a explorar más.
- Crea una falsa privacidad o sentido del yo , mientras que el camino del buscador invita y ve todo como parte de sí mismo.
- Te hace técnico, mientras que la ruta del buscador te hace un poeta.
- Necesita defender y alimentar la “privacidad” o el “tiempo a solas”, mientras que en la ruta del buscador no hay privacidad puesto que todo lo que vives es el verdadero yo.
- Ofrece muchas opciones y posibilidades, mientras que el camino del buscador es sin caminos.
Aprende a diferenciar estos dos, y verifica sinceramente lo que estás buscando. ¿Eres realmente un buscador de corazón? O te estas distrayendo por querer ser mejor y estar bien? De esta forma sabrás cuándo aplicar el auto-cuidado y entrar en ti mismo con sinceridad, paciencia y amistad.[:]